domingo, 31 de agosto de 2014

Los que mandan


Las masivas ayudas de los bancos centrales a los bancos privados


Por Eric Toussaint
CADTM, 23/08/2014.

(Nota del traductor): Las sumas de dinero se expresan en millones de…, teniendo en cuenta que 1 «milliard» es 1.000.000.000. (109) y en billones: 1 billón: 1.000.000.000.000 (1012).

Resumen: Después del estallido de la crisis bancaria en 2007, los bancos centrales de los países más industrializados prestan masivamente a los bancos con tipos de interés muy bajos, con el fin de evitar quiebras. De este modo los grandes bancos se benefician de esta medida economizando sumas considerables en el pago de intereses.

La FED compra generosamente a los bancos estadounidenses productos estructurados hipotecarios; el BCE, hasta ahora, no compra estos productos pero acepta que los bancos europeos los depositen como colaterales, en otras palabras, como garantía de los préstamos que a su pedido les concederá.

Con respecto a los gobiernos, éstos aportan sus garantías e inyectan masivamente capitales para recapitalizar a los bancos.

Los bancos sistémicos saben que, en caso de problemas, debido a su tamaño y del riesgo que presentaría la quiebra de cualquiera de ellos («too big to fail»), podrán contar siempre con el apoyo de sus Estados, que los reflotarán sin pestañear.

Los gobiernos buscan préstamos en los mercados financieros al emitir títulos de la deuda pública soberana. Confían en la venta de esos títulos a los grandes bancos privados. Éstos se benefician, por otra parte, de la reducción de los impuestos sobre las ganancias.

Además, en la zona euro, los bancos gozan del monopolio del crédito destinado al sector público.

A partir de 2007, los gobiernos y los bancos centrales de los países occidentales más industrializados, hundidos en la mayor crisis económica desde los años 1930, dieron la prioridad absoluta al rescate de los bancos privados y al sistema financiero que los rodea (sociedades aseguradoras, fondos de inversiones, fondos de pensiones privados…). |1| El rescate bancario se ha realizado a expensas de la abrumadora mayoría de la población (el 99 %). Los poderes públicos hicieron de todo para mantener los principales privilegios de los bancos privados y para dejar intacto su poder. El coste del rescate ha sido enorme: explosión de la deuda pública, pérdida de recaudación fiscal, fuerte restricción a los préstamos a los particulares y a las pymes, continuación de las actividades especulativas y de alto riesgo que, en ciertos casos, necesitaron nuevos y costosos rescates.

Los generosos préstamos de los bancos centrales a los bancos privados

Desde el estallido de la crisis bancaria en 2007, los bancos centrales de los países más industrializados (BCE, Banco de Inglaterra, FED de Estados Unidos, Banco Nacional de Suiza, Banco de Japón) prestan generosamente a los bancos con unos tipos de interés muy bajos, con el fin de evitar quiebras. Sin esta línea de crédito ilimitado, una gran parte de los bancos habrían entrado en cesación de pagos, ya que las fuentes habituales de financiación se han secado, los préstamos interbancarios han desaparecido (ya que los bancos no confían entre sí), las ventas de obligaciones bancarias es muy floja, y los préstamos diarios asegurados por los money market funds son aleatorios (véase recuadro). La suma total prestada desde los bancos centrales a los bancos privados, desde 2007, supera ampliamente los 2 billones de dólares. Como este maná del cielo se presta a un tipo de interés muy bajo permite a los grandes bancos que se beneficien al ahorrar sumas considerables en el pago de intereses.

Fuera de esas financiaciones directas, los bancos centrales utilizan otros medios para ayudar a los bancos privados.

La FED, por ejemplo, compra masivamente productos estructurados hipotecarios (Mortgage Backed Securities) a los bancos estadounidenses. Entre 2008 y comienzos de 2014, compró estos productos por un valor de un poco más de 1,5 billones de dólares. |4| En 2012-2013, compró mensualmente a los bancos y a las agencias inmobiliarias |5| que garantizan los créditos hipotecarios por 40.000 millones de dólares estos productos considerablemente tóxicos, con el objetivo de aliviar esa carga. A fines de 2013, comenzó a reducir sus compras que se elevaban, en marzo de 2014, a 35.000 millones de dólares por mes. En octubre de 2014, la FED poseerá 1,7 billones de dólares de MBS, o sea, cerca del 21 % del volumen total de esos productos tóxicos. |6| ¡Una enormidad!

El BCE no compra productos estructurados pero acepta que los bancos los depositen como colaterales, o sea, como garantía, de los préstamos que oportunamente les concederá. Durante el período 2010-2013, la cantidad de productos estructurados (ABS) depositados por los bancos en el BCE osciló entre 325.000 y 490.000 millones de euros.

El BCE compra también obligaciones (covered bonds) emitidas por los bancos privados para su financiación. |7| Se trata de una ayuda muy importante del BCE a los bancos que se encuentran con grandes dificultades para financiarse mediante los mercados. Esta ayuda no se publicita en los medios. Desde el estallido de la crisis, el BCE compró covered bonds por 76.000 millones de euros, 22.000 millones en el mercado primario y 54.000 millones en el secundario. Hay que señalar que el BCE compró sobre todo covered bonds que tienen un mala calificación (BBB–), lo que quiere decir que las agencias de calificación no tenían confianza en la salud de los bancos que emitieron esos títulos. Con fecha de 18 de marzo de 2014, el BCE poseía 52.000 millones de euros de covered bonds de los bancos. Es un monto muy importante comparado con el volumen de emisiones de esas obligaciones. En 2013, sólo llegó a 166.000 millones de euros, con un descenso del 50 % con respecto a 2011. |8|

¿Qué son los Money Market Funds?

Los Money Market Funds (MMF) son sociedades financieras, en Estados Unidos y en Europa, con muy poco o ningún control ni reglamentos ya que no gozan de licencia bancaria. Forman parte del shadow banking, el banco en la sombra. En teoría, llevan a cabo una política prudente pero la realidad es muy diferente.

El gobierno de Obama proyecta poner a punto una reglamentación ya que, en caso de quiebra de un MMF, hay un riesgo certero de tener que utilizar dinero público para su rescate. Esto provoca una gran preocupación, dado que los fondos que gestionan son considerables y que su margen de beneficio se redujo después de 2008. En 2012, los MMF estadounidenses gestionaban 2,7 billones de dólares de fondos, en comparación con los 3,8 billones de 2008. En tanto fondos de inversiones, los MMF recolectan los capitales de los inversores (bancos, fondos de pensión…). Este ahorro se presta rápidamente a muy corto plazo, a menudo en forma diaria, a bancos, empresas y Estados. En los años 2000, la financiación por MMF se había convertido en un componente importante de la financiación a corto plazo de los bancos. Entre los principales fondos, se encuentra el Prime Money Market Fund, creado por el principal banco de Estados Unidos, el J.P.Morgan, que gestionaba, en 2012, 115.000 millones de dólares. El mismo año, el Wells Fargo, el 4º banco estadounidense, gestionaba un MMF de 24.000 millones de dólares. El Goldman Sachs, el 5º banco, controlaba un MMF de 25.000 millones de dólares. En el mercado de los MMF en euros, volvemos a encontrar a sociedades estadounidenses: el J.P.Morgan (18.000 millones de euros), el Black Rock (11.500 millones de euros, el Goldman Sachs (10.000 millones de euros), y europeos, principalmente el BNP Paribas (7.400 millones de euros) y el Deutsche Bank (11.300 millones de euros). Algunos MMF operan también con libras esterlinas. A pesar de que Michel Barnier, comisario a cargo de los mercados financieros, haya anunciado que quería reglamentar el sector, hasta ahora no se ha hecho nada. De nuevo, declaraciones de intención que no se concretan. |2|

La agencia de calificación Moody’s calculó que durante el período 2007-2008, 62 MMF tuvieron que ser rescatadas de la quiebra por los bancos o los fondos de pensión que las habían creado. Se trata de 36 MMF que operaban en Estados Unidos y de 26 en Europa, con un coste total de 12.100 millones de dólares. Entre 1980 y 2007, 146 MMF fueron rescatadas por sus promotores. En 2010-2011, siempre según Moody’s, 20 MMF fueron reflotadas. |3| Esto muestra hasta qué punto pueden poner en peligro la estabilidad del sistema financiero privado.

Notas:

|1| En Japón, el gobierno y el Banco Central hicieron lo mismo a partir del estallido de la burbuja inmobiliaria y de la crisis bancaria a comienzos de los años 1990. Véase Daniel Munevar «Décadas perdidas en Japón» en el libro de Damien Millet y Éric Toussaint, dirección., La deuda o la vida, capítulo xvi, Icaria editorial, Barcelona, 2011.
|2| Financial Times, «EU shadow banking plan rapped», 26 de marzo de 2012; «MMF lose worth in low interest rate world», 10 de septiembre de 2012; «EU abandons reform on money market funds», 10 de marzo de 2014.
|3| Financial Times, «20 money market funds rescued», 21 de octubre de 2013.
|4| A fines de enero de 2014, el balance de la FED era superior a 4 billones de dólares: 2,228 billones en bonos del Tesoro y 1,586 billones en acreencias hipotecarias titulizadas (MBS).
|5| Fannie Mae, Freddie Mac y Ginnie Mae.
|6| Natixis, EcoHebdo, 25 de julio de 2014, N°29, http://cib.natixis.com/flushdoc.aspx?id=78192
|7| El banco Natixis, que evidentemente como todos los bancos es muy favorable a estas compras, publica informes entusiastas sobre este asunto desde 2009. http://cib.natixis.com/flushdoc.aspx?id=46663
|8| La emisión de covered bonds realizada por los bancos en 2013 fue la menor desde 1996. Comparada con la de 2011, descendió más de un 50 %. En 2011, la emisión de covered bonds llegó a los 370.000 millones de dólares, mientras que en 2013, representa solo 166.000 millones de dólares. Véase: Financial Times, «Europe covered bond issues slump», 27 de noviembre de 2013.

Disponible en:

sábado, 30 de agosto de 2014

Atrévete a pensar


Los bancos empezarán a pagar impuestos en 2015 a pesar de sus enormes créditos fiscales


Por Eduardo Segovia
El Confidencial.com, 29/08/2014.

Una de las grandes novedades de la reforma fiscal de Cristóbal Montoro es que obligará a la banca a pagar impuestos por primera vez desde que estalló la crisis financiera. Esto se debe a que, a partir de su entrada en vigor el próximo año, la norma no permitirá a las entidades compensarse sus enormes créditos fiscales por más del 60% de su base imponible (su beneficio). Eso no significa que vaya a perder esos créditos, sino que tardará más tiempo en recuperarlos –esta recuperación está garantizada desde el año pasado–. Y, mientras tanto, Hacienda consigue ingresar algo del sector, una ayuda más para tratar de cumplir los objetivos de reducción del déficit público.

Los bancos cuentan con 68.000 millones en activos fiscales diferidos (DTA), de los que 40.800 tienen su recuperación garantizada por tiempo indefinido. Los DTA garantizados provienen de las fuertes provisiones realizadas en los años anteriores para sanear la exposición inmobiliaria y las aportaciones a planes de pensiones, que no son deducibles fiscalmente sino que generan un activo fiscal para el futuro (diferido) que se resta de los impuestos que pagarán las entidades. Con el cambio de la norma del año pasado, el Gobierno garantiza que las entidades recuperarán todos esos activos aunque no tengan beneficios suficientes o aunque tengan pérdidas o se liquiden. El resto (no garantizados) provienen de bases imponibles negativas, es decir, de pérdidas contables de años anteriores.

El grueso de estos créditos se generó en 2012, el año en que el sector sufrió las mayores pérdidas de su historia por los famosos 'Decretos Guindos'. En los últimos ejercicios, el sector los ha utilizado para no pagar Impuesto de Sociedades, aunque ha vuelto a beneficios, con lo que ha devengado dicho gravamen; según el Banco de España, se devengaron 521 millones en el primer semestre de este año. Incluso los ha empleado para engordar su resultado con una parte de los DTA, que es lo que hicieron masivamente las cajas en 2013. Esto se debe a que, con la norma actual, estos créditos se pueden compensar sin límite contra los beneficios del ejercicio.

Y eso es lo que va a cambiar con la reforma fiscal a partir de 2015. Ninguno de los DTA, sea cual sea su origen, va a poder compensarse con el 100% del beneficio, sino que tendrá un tope del 60% del mismo. Es decir, que los bancos tendrán que tributar por el 40% restante. No sólo se devengará el impuesto, sino que se ingresará efectivamente en las arcas públicas. Es decir, si un banco gana 100, ahora mismo debería pagar 30 a Hacienda (devenga 30) pero utiliza sus DTA y paga cero. A partir del próximo año, debería pagar 30 y pagará realmente 12 (el 30% del 40% de su beneficio).

Así se recoge en el artículo 11.12 de la nueva ley, referido a los DTA procedentes de provisiones y pensiones (los específicos de la banca): "Las dotaciones por deterioro de los créditos u otros activos derivadas de las posibles insolvencias de los deudores no vinculados con el contribuyente, no adeudados por entidades de derecho público y cuya deducibilidad no se produzca por aplicación de lo dispuesto en el artículo 13.1.a) de esta Ley, así como los (...) correspondientes a dotaciones o aportaciones a sistemas de previsión social y, en su caso, prejubilación, que hayan generado activos por impuesto diferido, se integrarán en la base imponible de acuerdo con lo establecido en esta Ley, con el límite del 60 por ciento de la base imponible positiva previa a su integración, a la aplicación de la reserva de capitalización establecida en el artículo 25 de esta Ley y a la compensación de bases imponibles negativas".

En cuanto a los procedentes de pérdidas de años anteriores, la norma se aplica a todas las empresas aunque no sean financieras, y se recoge en el artículo 26 de la nueva norma: "Las bases imponibles negativas que hayan sido objeto de liquidación o autoliquidación podrán ser compensadas con las rentas positivas de los períodos impositivos siguientes con el límite del 60 por ciento de la base imponible previa a la aplicación de la reserva de capitalización establecida en el artículo 25 de esta Ley y a su compensación".

Esta norma no reduce los DTA que obran en poder de la banca. En el ejemplo anterior, el banco que gana 100 pagará 12, pero le quedarán 18 DTA que no ha utilizado en su balance que podrá compensar en los ejercicios siguientes. "Lo que se va a hacer con esta reforma es alargar hasta el Día del Juicio la compensación total de los DTA, pero Hacienda consigue aumentar su recaudación desde ya, lo que le importa mucho para cumplir con los objetivos de déficit", explica Francisco de la Torre, inspector de Hacienda y autor del libro ¿Hacienda somos todos?

Aparte de las consecuencias para Hacienda, la garantía de recuperación de los 40.800 millones citados implica que los bancos no tendrán que deducírselos del capital, como exigen las normas de Basilea III, lo que incrementaría su solvencia. De hecho, esa es la razón por la que se han garantizado, al igual que ha sucedido en el resto de Europa; es más, es el motivo por el que el tipo del Impuesto de Sociedades para la banca se va a mantener en el 30% en vez de bajarse al 25% como en las demás empresas, ya que así no disminuye el volumen de los DTA. La reforma fiscal no tiene implicaciones a efectos de solvencia, puesto que la cantidad garantizada es la misma; simplemente, se tendrá que recuperar en un número mayor de años.

(Nota de Carlos Javier Bugallo: ¡Vaya chollo el de la banca!: las provisiones necesarias para compensar en los balances las inversiones fallidas, al final desgravan (a posteriori) y permite a los bancos no pagar impuestos. El Gobierno financia y premia la especulación. OTRA FORMA ENCUBIERTA DE RESCATE BANCARIO que hay que denunciar.)

Disponible en:

El centro de la banca alemana y europea: el Deutsche Bank


Por Vicenç Navarro
Público.es, 28/08/2014.

Uno de los ejemplos más claros de la continuidad del poder financiero a lo largo de cambios políticos sustanciales en Europa y en España es el caso del Deutsche Bank, uno de los seis bancos más importantes del mundo y uno de los más influyentes en Europa. Su sede está al lado del Banco Central Alemán (el Bundesbank), el cual, a su vez, está al lado del Banco Central Europeo, el eje del sistema financiero europeo, cuyo comportamiento ha contribuido, en gran medida, a generar y mantener la enorme crisis financiera y económica europea, que ha sido particularmente perjudicial para el bienestar de las clases populares de España. Mírese como se mire, el Deutsche Bank ha jugado un papel clave en la generación de la gran recesión en la Eurozona, incluyendo en España. Es por lo tanto importante conocer sus orígenes y su historia, que adquiere especial relevancia durante el periodo de gobierno del nazismo en Alemania.

El Deutsche Bank fue el banco personal de Hitler, jugando un papel clave en el desarrollo de las políticas nazis, de las cuales se benefició extensamente. En parte, su gran riqueza derivó de la confiscación de las propiedades, tanto alemanas como extranjeras, que el Estado nazi alemán realizó durante su expansión en el resto de Europa. Esta realidad, ocultada durante mucho tiempo, está siendo documentada en juicios que las víctimas (muchas de ellas judías) están ganando en su intento de recuperar sus propiedades. Con la colaboración de la Gestapo y de las SS, el Deutsche Bank ingresó en sus arcas dinero, joyas, cuadros y otras propiedades de las poblaciones victimizadas por el nazismo, que incluían, además de judíos, otros grupos étnicos y políticos (como comunistas, socialistas y anarquistas), que el nazismo deseaba eliminar en los territorios conquistados. Es sorprendente que no haya sido hasta hace relativamente poco cuando se ha documentado este enorme latrocinio. El caso más conocido es el del Congreso Mundial Judío, que ha reclamado, en un juzgado de Nueva York, la compensación para las víctimas judías. Entre estas víctimas están las poblaciones gaseadas en los campos de exterminio de Auschwitz, campos, por cierto, también financiados por el propio Deutsche Bank (John Schmitt,”Deutsche Bank Linked to Auschwitz Funding”, The New York Times, 05.02.1999). A estas denuncias han seguido otras denuncias, llevando al Deutsche Bank a los tribunales intentando recuperar los fondos y/u obtener una compensación para las víctimas.

En España, este banco apoyó también tanto el golpe militar del General Franco como las ayudas militares del gobierno nazi a España, obteniendo generosos beneficios de esta financiación. En realidad, la historia del Nazismo no puede explicarse sin entender como éste se financió. Y ahí es donde el Deutsche Bank jugó un papel central. En la medida que los archivos del Deutsche Bank se van abriendo, se va descubriendo (medio siglo más tarde) el papel central que jugó dicho banco en el desarrollo del Nazismo y sus aliados, el fascismo italiano y el español. No ha habido ningún intento de recuperar el dinero robado a españoles, judíos y/o republicanos, expropiados por el nazismo o el fascismo en España, en contra de lo que ha ocurrido en la propia Alemania, en los países del Este de Europa y en Italia. La complicidad de las autoridades españolas en este olvido histórico es un indicador más de la baja calidad de la democracia española.

El Deutsche Bank generador de la crisis actual

El Deutsche Bank, que fue dividido en varios componentes después de la II Guerra Mundial, apareció de nuevo, unido y con gran esplendor, expandiéndose rápidamente por Europa y por EEUU, adquiriendo otros bancos con prácticas consideradas inapropiadas, incluso por prensa financiera como el Wall Street Journal, lo cual, considerando la enorme tolerancia de este rotativo hacia comportamientos claramente deshonestos, cuando no criminales, de la banca, es todo un hecho digno de subrayar. El Deutsche Bank, por ejemplo, jugó un papel clave en el escándalo Enron, cuando aquella compañía ocultó enormes pérdidas que causaron la miseria de millones de ciudadanos estadounidenses. El Deutsche Bank ha sido también uno de los bancos que más promocionó hipotecas basura en EEUU (y probablemente en España), claramente a sabiendas y concientes de las consecuencias tan negativas que tuvo para la población afectada. En realidad, el Comité del Senado de EEUU que analizó las causas de la crisis financiera iniciada en 2007, señaló al Deutsche Bank como uno de los bancos que contribuyó más a generar, mediante prácticas especulativas, la burbuja inmobiliaria en aquel país y su explosión, creando la mayor crisis financiera desde principios del siglo XX (cuando tuvo lugar la Gran Depresión). No ha habido un estudio semejante en el Senado o en la Cámara Baja española. Si lo hubiera habido, el Deutsche Bank habría salido también muy mal parado. Este banco ha invertido 12.000 millones de euros en inversiones, muchas especulativas, en España (18.000 millones en Italia), habiendo sido también una de las instituciones financieras más responsables de la crisis financiera en España.

La explosión de la burbuja inmobiliaria en EEUU creó una situación de pánico, pues el Deutsche Bank creyó que podría afectar a sus intereses. De ahí que paralizara cualquier transacción con otros países, incluyendo España, lo que determinó la explosión de la burbuja inmobiliaria. Ahora bien, el Deutsche Bank quiere recuperar su dinero en España. Y de ahí que, a través de su influencia en el gobierno y en el Parlamento alemán, estas instituciones aprobaran un préstamo de 100.000 millones de euros para que el Estado español rescatara a la banca, incluyendo el Deutsche Bank. Y uno de los objetivos de los recortes es pagar al Deutsche Bank, entre otros bancos.

El Deutsche Bank está esparcido por todo el mundo, financiando algunas de las mayores violaciones de los derechos humanos que han ocurrido en estos últimos años. Ha financiado, por ejemplo, la empresa minera AngloGold Ashanti y sus fuerzas mercenarias (FNI), responsables de crímenes contra la humanidad en la República del Congo. En Sudán, el banco ha financiado varias empresas petrolíferas responsables de los horrores de Darfur. En Indonesia, ha financiado a la empresa minera de oro y cobre Freeport-McMoRan, conocida por haber destruido regiones enteras del país contaminando sus ríos y manantiales, siendo, además, una de las mayores accionistas de empresas productoras de bombas atómicas y uranio.

La Eurozona está entrando en la tercera recesión (ver mi artículo “¿Recuperación? Estamos entrando en la tercera recesión”, Público, 26.08.14). Pero a la Banca, la situación le está yendo muy bien. Y el Deutsche Bank no es una excepción. Según la BBC los beneficios de este año han subido un 87% solo el año anterior, con la friolera cantidad de 3.200 millones de euros. Pero a la vez se continúa despidiendo a sus empleados, habiéndolo hecho con 6.400 empleados. Como ha indicado Reinhard Butikofer, dirigente del Partido Verde Alemán, “es incomprensible para mí que el Deutsche Bank, uno de los bancos con más beneficios actúe tan cínicamente destruyendo puestos de trabajo, contribuyendo al elevado desempleo en Alemania”. Conociendo su historia no tendría que ser tan incomprensible. Así se comportan los que en la práctica han gobernado y continúan gobernando en Europa hoy.

Disponible en:

viernes, 29 de agosto de 2014

¡Dios, que gente!


La gran banca remunera a sus consejeros con 21,9 millones hasta junio, un 4,3% más


Expansión.com, 27/08/2014.

La gran banca, el grupo compuesto por Banco Santander, BBVA, CaixaBank, Bankia, Popular y Sabadell, pagó en total 21,9 millones de euros a los miembros de sus consejos de administración en el primer semestre de 2014, un 4,26% más que un año antes.

El BBVA fue la entidad que más dinero destinó a sus consejeros, en concreto, 6,96 millones de euros; en el lado opuesto, Bankia fue la que menos, con 1,15 millones de euros, según los datos recopilados hoy por Efe de la información remitida a la CNMV.

De toda la gran banca, sólo el grupo presidido por Emilio Botín redujo la partida destinada a retribuir a sus consejeros en los seis primeros meses del año, en concreto un 25%, hasta 5,12 millones.

El principal motivo de esta caída es que un año antes aún formaba parte del máximo órgano de gestión de la entidad Alfredo Sáenz, que dimitió como consejero delegado a finales de abril de 2013 y recibía una retribución superior a la de su sucesor, Javier Marín.

Por el contrario, el resto de las grandes entidades engordaron a priori los sueldos de sus consejeros, especialmente el Banco Popular y el Sabadell, con crecimientos del 54 y el 32%, respectivamente, aunque estas dos entidades explicaron a Efe los motivos.

En el Popular, el aumento se debe principalmente a que en el primer semestre de 2013 la entidad no distribuyó variable con cargo al ejercicio anterior pues entonces estaba en pérdidas, y además los primeros ejecutivos del grupo han ganado algo más que en el pasado tras varios ejercicios con el salario congelado.

En el Banco Sabadell el incremento se justifica por el cambio del criterio aplicado, pues en la primera mitad de 2013 incluían únicamente lo que realmente recibían los consejeros y ahora figura cualquier cantidad que puedan llegar a obtener, por ejemplo, en función de cómo evolucione la acción de la entidad, de acuerdo con las recomendaciones de la Autoridad Bancaria Europea.

El siguiente mayor aumento en las retribuciones de los consejeros de la gran banca fue el de Bankia, del 27,7% más, aunque en este caso se debe a la incorporación de Antonio Ortega, lo que implica que su sueldo, aunque siga siendo el mismo, se sume al del consejo, según han explicado desde el grupo.

Los salarios de los consejeros de Bankia están congelados y sujetos a los límites impuestos por el Gobierno a las entidades con ayudas públicas.

Por último, las subidas de las retribuciones de los consejos de la gran banca más moderadas fueron las de BBVA, un 11,6% más hasta 6,96 millones; y la de CaixaBank, un 3,37% más hasta 3,16 millones.

Disponible en:

El juez cita como imputada a la cúpula de Caja España y Caja Duero por las preferentes


Público.es, 27/08/2014.

El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco ha citado como imputados para los días 22 y 23 de octubre a ocho responsables de Caja España y Caja Duero por "idear" presuntamente la emisión de preferentes y deuda subordinada como instrumento para capitalizar las entidades "a costa y en perjuicio de los clientes".

Velasco, titular del juzgado central de instrucción 6, ha adoptado esta decisión en una providencia después de que la sección tercera de lo Penal de la Audiencia Nacional le obligara el 29 de julio a admitir a trámite una querella de la Unión de Consumidores de Castilla y León (UCE) contra la cúpula de Caja España y Caja Duero, tras haberla archivado.

Para el 22 de octubre ha citado a declarar, de acuerdo con la querella y a petición de la Fiscalía Anticorrupción, a Santos Llamas y Julio Fermoso, expresidentes de Caja España y Caja Duero, y a los exdirectores generales de Caja España, Javier Ajenjo, y de Caja Duero, Lucas Hernández, han informado hoy fuentes jurídicas.

El día 23 el juez interrogará a los exdirectores financieros de Caja España, Antonio Fernández, y de Caja Duero, Arturo Jiménez; y el exdirector comercial de Caja España Óscar Fernández, así como su homónimo en Caja Duero que debe ser identificado por el banco CEISS, resultado de la fusión entre ambas cajas.

Todos ellos estaban acusados en la querella de delitos de estafa, publicidad engañosa, administración fraudulenta o desleal y maquinación para alterar el precio de las cosas.

Además de las citaciones, Velasco ha acordado requerir diversa documentación a Caja España de Inversiones, Caja Duero y Banco CEISS, así como a la CNMV y al mercado AIAF (mercado español de referencia para la deuda corporativa o renta fija privada) sobre la emisión de participaciones preferentes y deuda subordinada en 2009 y 2010.

La sección tercera de la Sala de lo Penal es la misma que ordenó al instructor del caso Bankia, Fernando Andreu, a investigar al expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa y a la cúpula directiva de esta entidad y de Bancaja por planificar la emisión de estos productos.

De hecho, en el auto en el que revocan el auto de archivo de la querella que ahora ha tenido que admitir Velasco, reproducen los argumentos que ya esgrimieron entonces para acotar el objeto de la investigación a "la emisión y comercialización primaria de preferentes y deuda subordinada" en 2009 y 2010 y a las personas que "idearon" su comercialización.

Excluye así la Sala tanto su venta como el case interno de operaciones -órdenes de venta de los clientes con las de compra por parte de los inversores-, al considerar que no existe "un plan preconcebido" para beneficiar de forma individual a unos en perjuicio de otros, por lo que anima a los perjudicados por ello a acudir a la vía civil.

Los magistrados recuerdan que la CNMV calificó en 2011 de "malas prácticas" la forma en que las entidades casaron la oferta y la demanda de las preferentes, pero instaurando este sistema, lo que buscaron y "efectivamente consiguieron" fue "la creación de un instrumento rápido y sencillo para dar liquidez" a estos productos.

Por tanto, "el error y hasta el incumplimiento normativo de las entidades estriba en no haber cambiado el procedimiento cuando, a resultas básicamente de la crisis financiera", el valor razonable se alejó del nominal, convirtiendo un "procedimiento correcto" en una mala práctica.

Disponible en:

miércoles, 27 de agosto de 2014

¡Esto es el Far West!


La banca y el Gobierno de Andorra temen el impacto del ‘caso Pujol’


Por Dani Cordero
El País, 23/08/2014.

Ni investigaciones sobre el dinero de narcos gallegos de hace casi tres lustros. Ni la más reciente operación Emperador contra la evasión de capitales de las mafias chinas. Por no hablar de los casos de evasión fiscal protagonizados por famosos como la tenista Arancha Sánchez-Vicario o la soprano Montserrat Caballé. Nada había enturbiado el día a día pirenaico de Andorra y nada había atemorizado a las clases dirigentes del país. Nada hasta que cayó el caso Pujol, con la demanda de información por la investigación abierta por blanqueo de capitales contra el primogénito del matrimonio Pujol Ferrusola y la herencia paterna que el expresidente de la Generalitat confesó que su familia había tenido oculta en el Principado durante los últimos 34 años.

El escándalo ha dejado heladas las tripas del Principado: la banca, responsable del 16% del PIB del país, y el Gobierno, en manos del liberal Demòcrates per Andorra y con cuatro de sus ocho ministros procedentes del sector financiero. Se niegan a dar explicaciones en público y mantienen un importante celo acerca de sus próximas actuaciones. “No nos hace ningún bien”, apenas ha dicho sobre el caso el jefe de Gobierno, Toni Martí, quien en una reunión con los representantes de la banca para hablar de las relaciones con la OCDE supo que los Pujol contaban con entre cuatro y cinco millones de euros en cuentas andorranas.

La banca teme que las comisiones rogatorias cursadas desde España para obtener la información fiscal demandada obtengan respuesta y puedan dinamitar el que ha sido su principal activo durante décadas: el secreto bancario. “Creen erróneamente que pueda haber una importante fuga de depósitos de sus clientes, que podrían llegar a la conclusión de que si se da información de Jordi Pujol la van a dar de cualquiera”, asegura el primer secretario del Partido Socialdemócrata Toni López sobre los responsables bancarios. “Estoy convencido de que el Gobierno quiere que se dé esa información”, opina Jaume Bartumeu, ex jefe de Gobierno y artífice de que la OCDE sacara a Andorra de la lista gris de paraísos fiscales en 2010.

Bartumeu defiende que su país no puede entenderse como unas Islas Caimán de las montañas pero subraya que la banca se negaba a cambiar de estatus y que, de hecho, fue esa oposición la que le hizo perder las elecciones en 2011. Otras fuentes financieras aseguran que la banca también está en contra de la firma del convenio de doble imposición.

Precisamente, el presidente español Mariano Rajoy se reunirá con Martí la primera semana de septiembre para abordar exclusivamente el citado convenio, según publicó el Diari d'Andorra. La banca, según las mismas fuentes, también intenta retrasar al máximo lo posible la implantación del sistema de intercambio automático de la información fiscal acerca de los ahorros bancarios. “Tendría que estar listo en 2015, pero quizás no estemos listos y hasta 2016 no podamos. Pero ellos intentan a ver si se puede retrasar hasta 2017”, señalan las mismas fuentes financieras.

Hay diferencias entre unos y otros, pero los propietarios saben que cada minuto más de statu quo financiero reparte más dividendos. El ejecutivo de una multinacional del derecho, que reclama anonimato, asegura que ya aprovecharon en su momento que Suiza relajaba su opacidad fiscal para ganar fondos de clientes acaudalados mientras hacían la vista gorda con la legislación local. “Hay algún banco poco sofisticado que cree que todavía se puede coger más dinero con ese modelo, pero lo cierto es que la situación y la presión internacional les supera”, dice, en referencia al control de las transacciones bancarias que se impuso tras los atentados del 11-S para controlar la financiación del terrorismo.

La última amnistía fiscal aprobada por el Gobierno español y las posteriores condiciones para regularizar —tipos del IRPF más multas— han dejado congeladas muchas cuentas, ya que cualquier transferencia puede convertirse en una pista para las agencias tributarias y regularizar puede suponer perder todo el dinero e incluso más, si se tienen en cuenta las multas. “Para el ministro Montoro, el caso Pujol es una victoria”, señala Antonio Durán-Sindreu, expresidente de la Asociación Española de Asesores Fiscales.

Pero si los clientes están entre la espada y la pared, los bancos también. Porque además de lucrarse con los 40.000 millones de euros que administran tienen que dar salida a las ganancias que han amasado durante años y que les han llevado, por ejemplo, a ser muy activos en España, haciéndose con fichas bancarias, contratando directivos y comprando gestoras de activos. Y esa alta exposición en España hace suponer que tampoco le plantearán la guerra al Gobierno español.

Disponible en:

La historia se repite


Quién y cómo destruye empleo en España y quién y cómo puede crearlo?


Por Juan Torres
Público.es, 27/08/2014.
Por Juan TorPúblico.es, 27/08/2014.

Después de publicar mi anterior artículo (Propuestas que podría tomar Podemos y que aterrorizan a la casta) algunos economistas me han criticado afirmando que con esas medidas no se crea empleo, que es el primer y más importante problema que tiene nuestra economía. Llevan razón, pero creo que solo en parte. Es verdad que son propuestas simplemente dirigidas a que la ciudadanía esté bien informada sobre las causas de nuestro males económicos. Pero esto no es solo algo necesario en sí mismo sino que también influye en nuestra capacidad de crear empleo, como mostraré enseguida.

En otros lugares, como otros muchos economistas, y especialmente en trabajos publicados junto a Vicenç Navarro, he tratado de explicar las causas que han producido una destrucción de empleo tan grande como la ocurrida recientemente en España y a partir de ahí he propuesto medidas para poder volver a crearlo de calidad (por ejemplo, en Hay alternativas. Propuestas para crear empleo y bienestar social en España). Trataré de sintetizar a continuación las ideas principales al respecto.

A mi juicio, la primera exigencia para poder crear empleo en España es conocer bien qué factores lo han destruido y creo que éstos están bastante claros:

1. El estallido de una burbuja inmobiliaria que disparó el desempleo en el sector de la construcción y en las actividades vinculadas a él.
2. La debilidad estructural de una economía como la española en donde la actividad agraria e industrial y las fuentes de generación de mayor valor añadido han ido perdiendo peso o vinculación con nuestros intereses en los últimos decenios, lo que ha hecho que, al estallar la crisis de la construcción, no se dispusiese de “colchón” suficiente en otros sectores para generar nuevo ingreso y absorber el empleo que allí se iba perdiendo.
3. La crisis financiera derivada, al mismo tiempo, de la internacional y de la originada en el sector bancario nacional como consecuencia del gran negocio que hizo la banca española endeudándose para financiar la burbuja inmobiliaria (y haciendo luego que esa deuda la asumiera el conjunto de los españoles).
4. El extraordinario y vertiginoso incremento de la deuda pública desde que estallaron esos problemas, lo que ha hecho que el sector público disminuyera su capacidad de generar empleo y de ayudar a que lo genere el sector privado (el estado español ya gasta más en intereses que en personal).
5. El gran incremento de la desigualdad producido en los últimos años que ha generado una gran concentración del ingreso en los sectores de renta con menor propensión a consumir, debilitando así el mercado interno de bienes y servicios.
6. Las políticas de austeridad europeas que han disminuido el ingreso y el empuje de la economía justo cuando ésta ya se estaba hundiendo, produciendo lo que los economistas llamamos un efecto “procíclico” que ha impedido (en beneficio de la banca y de las grandes empresas) que se saliera antes y mejor de la crisis y de la destrucción de empleo.

Todo ello ha dado lugar a tres grandes y coincidentes problemas que han hundido nuestra economía:

a) Una crisis de demanda como consecuencia de la caída del consumo (por la pérdida de renta, sobre todo en las clases de menor ingreso), de la inversión (por las menores expectativas de beneficio de las empresas que viven de ese consumo), y del gasto productivo del Estado. Como no puede ser de otra manera, al caer la demanda de bienes y servicios (y apenas recuperarse un poco las exportaciones), las empresas han perdido ventas y beneficios y han cerrado o han tenido que despedir a millones de trabajadores.
b) Una crisis de financiación, pues la banca española, prácticamente en quiebra generalizada, ha dejado de financiar a las empresas y familias, lo que ha agravado los efectos del punto anterior.
c) Una crisis de deuda soberana que, aunque no ha llegado al límite, dificulta la llegada de inversión productiva hacia España y se convierte, por el contrario, en fuente de salida de capital y en incentivo para la especulación, lo  que empeora todos los problemas que vengo señalando.

A lo anterior habría que añadir que el gobierno del Partido Popular y antes el de Zapatero no han hecho frente a este tipo de males. Se han dedicado a satisfacer los intereses de la banca y las grandes empresas (que son las que viven en menor medida del consumo y del mercado interior) aplicando medidas de reforma laboral que simplemente facilitan el abaratamiento del trabajo y que el empleo fijo o a tiempo completo se sustituya por otro temporal y a tiempo parcial, dando así la imagen falsa de que se crea empleo cuando en realidad sigue disminuyendo, porque baja el total de horas trabajadas y los ingresos salariales.

A la vista de todo ello, creo que se pueden deducir algunas ideas básicas a tener en cuenta si se quiere crear empleo en España:

1. Hay que recuperar los ingresos porque el empleo depende, sobre todo, de que haya suficiente demanda en el mercado de bienes y servicios. Y para ello es imprescindible poner freno al incremento de la desigualdad y a la concentración de la renta: hay que subir los salarios más bajos, aumentar su peso en la renta total y forzar un gran pacto de rentas que lleve ingreso adicional a la demanda que sobre todo va a la pequeña y mediana empresa. Se pueden tomar además otras medidas para aumentar la renta disponible de las familias (que con las políticas de Rajoy no deja de bajar) como moratorias o reducciones temporales en el pago de hipotecas de las familias con menor ingreso. Y se pueden reducir los gastos de las familias vinculados a servicios de empresas cuasi monopolistas como las de la luz, el agua y otros servicios esenciales, ahora excesivamente altos por su dominio político de los mercados y las instituciones.
Querer recuperar el empleo bajando aún más los salarios con el pretexto de que la economía española sea más competitiva es una quimera, por no decir que un gran engaño. Es mucho más realista, efectivo y socialmente beneficioso recuperar la actividad de las empresas y el empleo consiguiente sacando adelante el mercado interior. Aunque ello no quita que al mismo tiempo haya que realizar reformas que faciliten la búsqueda de empleo y la contratación, que eliminen incentivos perversos y que hagan más efectivas las políticas activas de empleo en los mercados de trabajo sin empeorar la calidad del empleo y el bienestar social.
2. Hay que disponer inmediatamente de una banca que financie a las empresas que pueden generar empleo. Banca que debe ser pública pero dirigida con la mayor solvencia técnica y controlada férreamente para que no se reproduzcan los males que ha provocado la actual clase política en las cajas de ahorros.
3. Hay que llevar a cabo un programa de ahorro, mejora y racionalización de todas las administraciones públicas para acabar con todo tipo de despilfarro y realizar una reforma fiscal basada en tres pilares fundamentales: el apoyo a la creación de riqueza sostenible, la equidad y la lucha contra el fraude.
4. Sin perjuicio de que España debería afrontar a medio plazo cuál debe ser su papel en Europa y en qué medida está dispuesta a aceptar las imposiciones de potencias extranjeras o de una moneda europea diseñada erróneamente o solo para beneficiar a las grandes corporaciones y bancos, se puede empezar a utilizar una moneda complementaria que aumentaría casi de modo inmediato el poder de compra de los sectores con más propensión al consumo y que serviría de motor inmediato para la recuperación de la mediana y pequeña empresa.
5. Puesto que es materialmente imposible (y además indeseable) que la economía española vuelva a crear empleo basándose en la construcción, en el endeudamiento generalizado, en la especulación o en el “tirón” (como ingenuamente quería el gobierno) de un minúsculo sector de empresas exportadoras, es imprescindible orientar la inversión empresarial hacia nuevas actividades, aprovechando en la mayor medida posible el capital generado hasta la fecha: remodelación urbana y residencial, energías alternativas, producción local y de proximidad, etc. Y muy particularmente debe ser prioritario en este aspecto acabar con el trabajo negro, dignificar todo tipo de empleo y promover con la mayor intensidad posible el empleo femenino, para lo que hoy día es fundamental el desarrollo de un potente sector de cuidados y acabar con todo tipo de prácticas laborales discriminatorias.

Naturalmente, ni estas ideas son todo lo que hay que poner en práctica para crear empleo, ni la concreción adicional a la que hay que llegar es todo lo que se necesita.

Como dijo en su día alguien nada sospechoso de izquierdismo, el profesor Fuentes Quintana cuando fue nombrado ministro de Economía y vicepresidente del gobierno:

“Las soluciones de los problemas económicos nunca son económicas sino políticas. No hay oscuras fórmulas técnicas que permitan resolver las dificultades en un clima de gabinete. Los problemas económicos de un país solo pueden superarse mediante el esfuerzo y la colaboración de todos (…). Sé, desde luego, que solo puede esperar esa colaboración un gobierno en quien ustedes confíen como veraz y que les merezca credibilidad”.

Es una ingenuidad, por tanto, creer que un grupo de tecnócratas o gobiernos como los que está teniendo España en los últimos años pueden proporcionar soluciones definitivas para crear empleo, o que esto se puede conseguir mientras los ciudadanos se dejen engatusar por lo que dicen quienes están a sueldo de una exigua minoría social. En España se han destruido millones de puestos de trabajo porque la “solución” política de los últimos años fue la impuesta al conjunto de la sociedad por un grupo muy reducido de españoles -banqueros, promotores y grandes empresarios ayudados por políticos venales y corruptos-. Y, por eso, lo que ahora es prioritario para crear empleo es invertir el orden de preferencias para hacer que la prioridad sea repartir los recursos de modo más igualitario y permitir así que la mayor parte de ellos se conviertan en fuentes de ingresos para todos, y no en gigantescos patrimonios parásitos o dedicados a especular destruyendo empresas, riqueza y empleos, como hasta ahora.

Por eso es tan importante que la inmensa mayoría de los españoles se informe sobre todos estos temas y sobre las causas de nuestros males. No se trata de mirar atrás para cultivar la curiosidad o la revancha, ni mucho menos, sino justamente de lo contrario: el reto es generar respuestas entre todos que impidan que en el futuro unos pocos vuelvan a imponer sus intereses sobre el conjunto de la sociedad con las consecuencias que ahora estamos sufriendo.

Disponible en:

martes, 26 de agosto de 2014

Las contradicciones de la banca privada


La banca da por perdidos 73.000 millones por impagos en financiación, el 14% más.


Por E. Contreras
El Economista.es,25/08/2014.

Con los primeros signos de recuperación económica algunos indicadores bancarios ofrecen síntomas de mejora: el hundimiento del crédito parece que se frena y la entrada de nuevos impagos muestra señales de agotamiento.

Pero el deterioro de los activos, en su globalidad, sigue sin detenerse. La banca dio por perdidos 73.065 millones de euros hasta final de 2013, cifra que excede en 9.308 millones o el 14,59% los 63.757 millones acumulados hasta el ejercicio previo.

Son los llamados "fallidos", catalogación que reciben los activos cuando la expectativas de recuperación son casi nulas. El volumen se ha disparado un 129,34% desde 2009, detalla la Memoria de Supervisión del Banco de España. Bajo este título se alojan las financiaciones que han pasado, sin éxito, todo el proceso de recobro desde que saltan las alarmas de apuros del cliente; y otros activos como son los préstamos condonados.


Para tener mejor imagen del menoscabo causado por la crisis en el balance de la banca, es preciso sumar los créditos dudosos o morosos, denominación que reciben nada más acumular el cliente tres cuotas de amortización sin pagar. La suma de fallidos y dudosos elevó el problema a 270.300 millones el pasado año -197.235 millones eran solo dudosos-, un 17% superior a los 231.245 millones del año previo y los 125.186 millones de 2009.

El boquete tiene gran parte de su origen en la alegría con que se financió el boom inmobiliario. A finales de 2013, el sector arrastraba 173.900 millones entre financiación problemática e inmuebles adjudicados, equivalente al 8,2% de su balance. Solo los activos adjudicados ascendían a 79.100 millones, cubiertos con provisiones al 49% de su valor, estima el servicio de estudios de La Caixa.

Cuando una operación suma tres impagos, el Banco de España exige considerarla dudosa y comenzar a efectuar provisiones por si deriva en un quebranto irrecuperable. En ese momento se activa toda la maquinaria para dar facilidades al cliente a fin de que se ponga al corriente y restaurar la calificación de "normal" a la operación: rebajas en los intereses, ampliar el plazo de repago, refinanciaciones, etc.

Si el proceso es infructuoso pasan al cajón de fallidos y las entidades los dan de baja de los balances. En la práctica no representan riesgo alguno porque han sido provisionados en su totalidad y no devorarán más recursos. Han dejado de ser problema contable pero resultan alto expresivos de la gravedad de la crisis.

El volumen engorda a un ritmo acelerado fruto de distintos factores, aunque el más determinante es que, una vez completado el saneamiento e intentado, sin éxito, ayudar al cliente a pagar la deuda con facilidades en su abono, el último capítulo es declararlo fallido. Y una vez realizada la dotación hay un incentivo en la venta de carteras fallidas por las que pujan casi medio centenar de especialistas en recobro y de fondos extranjeros.

Los inversores suelen pagar apenas entre un 1 ó 5% del valor nominal en créditos al consumo y hasta el 50% si la financiación está avalada con inmuebles que pueden quedarse al ejecutar la hipoteca. Para la banca, cualquier ingreso es plusvalía al estar totalmente provisionado. Los compradores confían en recuperar entre un 5 y 15% del importe volviendo a ofrecer facilidades de pago al cliente o permitiéndoles simplemente cancelar la deuda con un abono similar. Es el equivalente a permitirles que dejen su deuda atrás con quitas del 85 ó 95%, algo fuera de la práctica bancaria por riesgo de contaminar la gestión.

Se estima que el pasado año pudieron venderse carteras con créditos e inmuebles por un valor nominal de 6.000 a 10.000 millones, aunque son transacciones confidenciales y muchas nunca salen a a luz.

Lo razonable es que la cartera de fallidos irá a más por el elevado saldo en dudosos. Ha de pasar un año o incluso varios para que la entidad desista de su recuperación desde que se declaran los primeros impagos. Tras alcanzar un récord el pasado enero, el saldo de morosos se ha deslizado hasta 185.862 millones en, es decir, 11.414 millones menos desde el máximo histórico. Habrá que comprobar si dicha disminución es por menor entrada de impagos o porque muchos se dan por perdidos y van a engrosar la cartera de quebrantos.

Disponible en:
http://www.eleconomista.es/interstitial/volver/50023286782/empresas-finanzas/noticias/6029222/08/14/La-banca-da-por-perdidos-73000-millones-por-impagos-en-financiacion-el-14-mas.html#.Kku8dIqTxF9aHSj

 


lunes, 25 de agosto de 2014

Mensaje tranquilizador


La banca no ve la recuperación de Rajoy: sigue quedándose pisos y sin dar crédito


El Confidencial,  24/08/2014

El discurso oficial de las grandes empresas españolas se ha sumado con entusiasmo al mensaje triunfalista que lanzó Mariano Rajoy sobre la recuperación económica al inicio de las vacaciones. Pero en privado su visión es mucho más oscura. Al menos la de la banca, que es la clave para la salida de la crisis. Según confiesan sus ejecutivos, la recuperación no se ve por ningún lado: siguen adjudicándose inmuebles por falta de pago, siguen refinanciando a empresas que saben que no van a poder devolver nunca sus préstamos y el aumento del crédito es casi testimonial.

"La recuperación económica es aún muy leve, la mejora que muestran las grandes cifras aún no se traslada a la calle, las gente no está mejor en el día a día Y todavía queda un tiempo para que veamos el final de la crisis", señala un ejecutivo de una entidad importante que oficialmente habla de reducción de la morosidad y de aumento del crédito.

Precisamente, la mejoría de las cifras de morosidad (llevan bajando todos los meses desde febrero) se ha interpretado como un indicador del final de la crisis para la banca. Sin embargo, una fuente de otra entidad relevante descarta esta visión: "La morosidad se ha frenado porque los bancos seguimos adjudicándonos inmuebles y seguimos refinanciando empresas, dándoles más tiempo, a pesar de que sabemos que nunca vamos a recuperar esos créditos. Si no lo hiciéramos, la mora no habría dejado de marcar máximos históricos".

Respecto al ladrillo, es verdad que las principales entidades han reducido su stock gracias al aumento de las ventas en el último año, y que el ritmo de entradas es muy inferior a los peores años de la crisis. Pero eso no significa que hayan dejado de entrar inmuebles en los balances de la banca. "Todos los días entran nuevos activos procedentes de empresas y particulares que llevan años intentando devolver sus préstamos y a los que se han concedido facilidades, pero que al final han tenido que tirar la toalla porque era imposible", explica una de las fuentes.

No sólo es la banca la que duda de que la recuperación sea tan sólida como asegura el presidente. Los últimos datos de comercio exterior muestran una ralentización preocupante, que cuestiona la capacidad de las exportaciones para seguir siendo el principal impulso del crecimiento

Refinanciaciones a mansalva

En cuanto a las refinanciaciones, son significativas operaciones recientes como las de Amper, Esther Koplowitz, Sacyr o Prisa; por cierto, es muy significativo que las entidades corran a deshacerse de deuda del grupo de comunicación con una quita de 'sólo' el 25% . O el crédito de 1.000 millones de los 'bonos patrióticos' de la Generalitat de Cataluña. Por no hablar de la llamativa refinanciación concedida por Bankia al Valencia Club de Fútbol, en la que le otorga 15 años más para pagar el crédito de 230 millones con tres años de carencia de capital. Unas refinanciaciones que ya no hay que provisionar gracias a la marcha atrás del Banco de España en esta materia. Claro que hay veces que la banca también se rinde y prefiere quedarse con la empresa antes que seguir dando patadas hacia delante sin sentido, como en el caso de San José.

En esta situación, un incremento del crédito es casi impensable. "Todos los bancos afirman que están aumentando la nueva producción de crédito, pero este incremento está muy lejos de los niveles necesarios para salir de la crisis y los diferenciales a los que se concede son todavía demasiado altos como para que casi nadie pueda asumirlos. Hace falta que se reduzca de verdad el riesgo para que los diferenciales bajen, y para eso todavía falta", según uno de los ejecutivos consultados. El propio BCE confirma que los estándares de crédito en España no se han relajado, al contrario que en el resto de Europa.

Las cifras macro también siembran dudas

No sólo es la banca la que duda de que la recuperación económica sea tan sólida como asegura el presidente del Gobierno. Los últimos datos de comercio exterior muestran una ralentización preocupante, que sumada al deterioro del PIB en Alemania, Francia e Italia, cuestiona la capacidad de las exportaciones para seguir siendo el principal impulso del crecimiento español. El Gobierno insiste en mantener sus previsiones de crecimiento, pero cada vez más economistas las cuestionan.

En todo caso, el sector financiero considera que lo peor ha pasado: "No es que las cosas vayan a ir todavía a peor, es que todavía no han empezado a mejorar y van a tardar en hacerlo", según una de las fuentes consultadas. "No creemos que vaya a haber más paro, pero sí que el actual se va a reducir muy lentamente", añade otra. Lo mismo ocurre con la propia banca: "El problema no es que el deterioro vaya a hundir a nadie más que haya que rescatar, sino que no vamos a poder dejar de hacer provisiones ni liberarlas, lo que va a impedir que la rentabilidad del negocio mejore desde los niveles mínimos actuales"

Disponible en:

domingo, 24 de agosto de 2014

La banca se renueva


Rebelión financiera contra los poderosos


Rebelión, 13/08/2014.

Dicen que los golpes enseñan y todo indica que tras padecer durante años demoledoras adversidades financieras, las naciones en desarrollo y las emergentes han comprendido que la única forma de mantener finanzas seguras es mediante la creación de bancos que les sean confiables y afines.

Dos instituciones financieras han surgido recientemente: los integrantes del BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) acordaron crear el Banco de Desarrollo y un Fondo de Reserva, y la Unión de Naciones del Sur (UNASUR) fundó el Banco del Sur.

Los países integrantes de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) funcionan desde hace más de un año con el Banco del ALBA, y muchas de sus transacciones la realizan con el Sucre, (una moneda virtual) sin tener que acudir directamente al dólar.

El Banco del BRICS funcionará con un capital inicial autorizado de 100 000 millones de dólares, y un capital suscrito de 50 000 millones, que será compartido por igual entre los fundadores. La sede estará en Shanghái, y tendrá un centro regional en Sudáfrica.

El Fondo de las Reservas de Divisas (anticrisis) contará en un inicio con 100 000 millones de dólares y las cuotas se distribuyeron de la siguiente forma: Rusia, India y Brasil proporcionarán 18 000 millones de dólares cada uno, Sudáfrica 5 000 millones de dólares y China 41 000 millones de dólares.

Entre los propósitos del Banco se encuentra la de financiar proyectos de infraestructura y desarrollo sostenible de sus miembros y de terceros países fuera del grupo.

A todas luces, las dos instituciones nacen como alternativas al BM y al FMI pues reducirán la dependencia del mundo de esos centros financieros y también permitirán distanciarse de la moneda verde que aun hoy permanece como la principal en los intercambios comerciales globales.

Tras la creación del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) la mayoría de los préstamos y las operaciones financieras se han movido a través de estos emporios controlados por Estados Unidos y los países desarrollados de Europa Occidental.

En una estación de esquí denominada Bretton Woods, en New Hampshire al noreste de Estados Unidos, nacieron en julio de 1944, el FMI y el BM. El primero, en teoría, tenía como motivo principal apoyar con créditos a los países que sufrían dificultades de pago, mientras el segundo ayudaría a las naciones pobres con préstamos favorables para inversiones en infraestructura, educación y sanidad.

En la práctica y sobre todo en las dos últimas décadas, estos organismos financieros internacionales han ayudado a agravar la pobreza de los países que aceptan sus condiciones para poder utilizar sus créditos.

Estados Unidos, por las cuotas que aporta, posee el 17,14 % de los votos en esas instituciones y los países industrializados un tercio. Por esas prebendas, imponen que el presidente del BM sea un estadounidense y el director del FMI, un europeo, además de que las sedes de ambas instituciones se encuentran en Washington.

Sin el visto bueno del FMI, que como censor determina la voluntad y capacidad de un país para pagar el servicio de la deuda, no se entregan empréstitos, los que una vez otorgado, los gobiernos receptores deben someterse a condicionamientos que van desde recomendaciones no obligatorias hasta inspecciones extremas con imposición de sanciones de carácter forzoso.

Sus esquemas de ajustes van directamente encaminados a buscar la confianza de los mercados internacionales de capital en el país deudor, como ha ocurrido en Grecia, Portugal, España, Irlanda, y cuyas consecuencias han sido pecaminosas para la mayoría de sus habitantes al reducirse los programas sociales.

En 1989 se creó el llamado Consenso de Washington que impulsó las políticas neoliberales y de privatizaciones iniciadas en la década de 1970. Este mecanismo marca en la actualidad las políticas de presión y chantaje hacia las naciones en desarrollo suscritas por los organismos financieros internacionales.

Se le llamó Consenso de Washington por la coincidencia de opiniones (que ya no era nada nuevo) entre los diseñadores y gestores de la política internacional estadounidense con el FMI, BM y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID)

En aquella ocasión, los acuerdos fundamentales a que llegaron los integrantes en ese cónclave y que han regido las políticas financieras mundiales en los últimos 25 años, fueron los siguientes: reducción del papel del Estado en la economía; privatización de empresas estatales; eliminación de los déficit públicos y fijación de políticas cambiarias “realistas”.

Desde entonces, Estados Unidos y esos tres bancos, se abrogan el derecho y la potestad de dirigir las líneas económicas de las naciones del orbe y quienes se nieguen a seguirlas no podrán disponer de empréstitos o financiamientos para un hipotético desarrollo económico.

Lo que ocurre en la práctica es que los préstamos obtenidos tras ignominiosas negociaciones, se convierten en impagables pues a estos se suman los elevados impuestos que las débiles economías de las naciones no pueden sufragar. Como resultado, la deuda con el organismo aumenta y los gobiernos se hacen más dependientes de los emporios financieros.

La institución suiza denominada Declaración de Berna ha calificado al FMI y al BM como “burocracias antidemocráticas, hipócritas y poco transparentes”.
Por eso, el surgimiento de los Bancos del BRICS y del Sur, unidos al del ALBA, son relevantes opciones financieras que disminuirán las influencias sobre las naciones menos desarrolladas del planeta que durante décadas han mantenido el FMI, BM y BID.

Disponible en: